¿Buscas una escapada rápida, sin complicaciones y con mucho por descubrir? Calatayud es justo lo que necesitas. Si estás en Zaragoza o Madrid, este destino a medio camino es perfecto para desconectar y vivir una experiencia auténtica sin perder mucho tiempo en el viaje.
A un paso de casa, pero con aire nuevo
Desde Zaragoza, llegar a Calatayud es cuestión de menos de una hora en coche o tren. Desde Madrid, apenas dos horas y media. Eso hace que puedas plantearte una escapada de fin de semana sin estrés ni largas horas en carretera. Llegas, te instalas y empiezas a disfrutar.
Qué hacer en Calatayud en una escapada
Pasear por el casco histórico y sus calles llenas de historia.
Visitar las iglesias mudéjares y el Castillo de Ayub.
Saborear la gastronomía local con platos como el ternasco o las migas.
Relajarte en el entorno natural del Monasterio de Piedra, muy cerca de la ciudad.
Descubrir las bodegas con DO Calatayud y probar vinos con personalidad.
Dónde alojarte para aprovechar al máximo
En el Hotel Fornos, situado en el corazón de Calatayud, tienes todo a mano: comodidad, buen trato y un restaurante donde disfrutar de la mejor cocina local. La ubicación céntrica te permite ir a pie a la mayoría de los sitios y desconectar desde el primer minuto.
Una escapada que recarga pilas
No hace falta irse muy lejos para cambiar de aire. Calatayud ofrece historia, cultura, naturaleza y gastronomía en un paquete ideal para desconectar y volver renovado. ¿Lo mejor? Que está al alcance de tu mano si vives en Zaragoza o Madrid.
